Esta crisis está situando a amplias capas de la población gitana europea en una situación de seria vulnerabilidad, indefensión y desprotección en lo que respecta al disfrute de sus derechos fundamentales.
Las personas gitanas están sobrerrepresentadas entre las personas más vulnerables de la Unión Europea y por ello, es mucho más probable que sufran el impacto negativo de cualquier crisis, incluido el actual brote del Coronavirus (COVID-19). Esta crisis ya está situando a amplias capas de la población gitana europea en una situación de seria vulnerabilidad, indefensión y desprotección en lo que respecta al disfrute de sus derechos fundamentales.
En este contexto de emergencia, es urgente prestar una atención particular a los grupos sociales más desfavorecidos y movilizar todos los instrumentos políticos y financieros para poner en marcha medidas de emergencia que contribuyan a prevenir, evitar y aliviar el impacto negativo de esta crisis sanitaria en aquellas personas que están más afectadas por la pobreza, la exclusión social y la marginalidad, como es el caso de una gran parte de la población gitana europea.
Si bien en las fases iniciales era esencial informar y promover medidas sanitarias de prevención y contención, ahora es de gran importancia abordar un nuevo escenario más complejo en el que se combinan nuevos riesgos sociales que se suman a la situación sanitaria y a la previa situación de alta vulnerabilidad que arrastra la población gitana.
Respuesta de las instituciones europeas
Nos alegra ver que la Comisión Europea ha reaccionado frente a esta situación. El 13 de marzo adoptó una respuesta coordinada a nivel europeo para contrarrestar el impacto económico del Coronavirus que incluye una serie de propuestas para garantizar medidas de apoyo a nivel nacional para abordar el brote del COVID-19 lo antes posible. Una de las más importantes se refiere a la movilización del presupuesto de la Unión Europea de modo que los instrumentos existentes puedan servir para aliviar el impacto negativo de esta crisis sanitaria.
La financiación procedente de la Política de Cohesión y del Fondo de Solidaridad de la Unión Europea (FSUE) tienen un papel fundamental en el primer paquete de medidas adoptado como parte de la «Iniciativa de inversión en respuesta al coronavirus». Además, el 2 de abril la Comisión lanzó la Iniciativa de Inversión en «Respuesta al Coronavirus Plus (IIRC+)» para complementar las medidas adoptadas en el marco del primer paquete introduciendo una flexibilidad extraordinaria para permitir que puedan movilizarse al máximo toda la ayuda no utilizada de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (Fondos EIE).
Como parte de la respuesta conjunta de la UE, el Parlamento Europeo también adoptó, de forma casi unánime, su posición sobre las propuestas de la Comisión Europea el 26 de marzo. Tras la adopción formal de las medidas por parte del Consejo Europeo el 30 de marzo, se publicaron en el Diario Oficial el 31 de marzo y entraron en vigor el día después.
Impacto de la crisis del COVID-19 en las comunidades marginadas tales como la población gitana y el papel de los instrumentos políticos y financieros
En este contexto, sería importante saber más sobre cómo esta crisis tan compleja y urgente está afectando a las comunidades marginadas tales como la población gitana y sobre cómo los Estados miembro están usando o planean usar los Fondos EIE para abordar esta situación. Para contribuir a este proceso, la Red EURoma está recogiendo información entre sus socios sobre el uso de los Fondos EIE para abordar el impacto negativo de esta crisis en las personas gitanas de la Unión Europea.
